El insaciable hambre mundial por los fosfatos.

Laurence Knight y Tim Bowler, BBC

El aumento de la población desde la revolución industrial ha traído consigo que se tengan que producir una mayor cantidad de alimentos. Ya lo decía el economista Robert Malthus a inicios del siglo XIX: En lapsos de 25 años, La población crece en forma exponencial mientras que la producción de alimentos lo hace en forma aritmética.

Los fosfatos se utilizan principalmente para el crecimiento de las plantas, asimismo se utilizan en detergentes y diversos procesos industriales. De todos los fosfatos depositados en los sembradíos, solo una parte es consumida por las plantas mientras que la mayoría es lavada por la lluvia, llega hasta los ríos y lagos donde provoca la reproducción de bacterias quienes eliminan el oxígeno del agua.

En la última década el precio de los fosfatos se ha incrementado considerablemente debido a los costos  de extracción. Para evitar que en el futuro tengamos problemas de desabasto, se proponen varias medidas: a) uso de fosfatos con moderación, b) Modificación genética de las plantas para una mayor eficiencia, c) Regulación de los fosfatos, pero la idea que más está revolucionando el campo de los fosfatos es d) Obtención de fosfatos a partir de aguas residuales, proceso en el que se extrae el granulado a partir de sedimentos residuales de tuberías.

Sin duda, los fosfatos son importantes para la producción de los alimentos, el aumento en el precio de ellos afectaría a las personas que se dedican a la agricultura  e incluso podría desatar conflictos bélicos para tener su control, pero se debe poner especial atención a los efectos maléficos que pueden provocarle al medio ambiente.

Se deben sustituir este tipo de fertilizantes por otros de origen orgánico y además se deben promover proyectos que tienen como fin el reciclado de fosfatos en las aguas residuales. Ya que de continuar así, los daños a los ecosistemas acuáticos serán irremediables y además el costo para remediar sus efectos serán cada día más grandes.

Bibliografía

Laurence Knight y Tim Bowler, BBC. 11 de noviembre 2013. De: http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2013/11/131106_economia_fosfatos_crisis_il.shtml?ocid=socialflow_twitter_mundo

Apertura de la 19a convención de clima de la ONU en Varsovia.

El presente día, 11 de noviembre de 2013, dará comienzo la Convención de la ONU sobre cambio climático donde se reunirán alrededor de 190 países. El tema central de la cumbre será la reducción de gases de efecto invernadero.

Partiendo del informe intergubernamental sobre cambio climático divulgado en septiembre pasado donde informa sobre la responsabilidad del hombre ante el cambio climático, comprometiendo la voluntad de la ONU para no rebasar el umbral de 2°C para finales de siglo.

Lo cierto es que, cumbre tras cumbre (Johannesburgo, Cancún, Rio, etc) se han fijado metas que  al final solo quedan en buenos deseos de los jefes de estado para disminuir los efectos de cambio climático. Se debe crear un compromiso firme que todos los países (desarrollado o no) disminuyan la emisión de gases de efecto invernadero.

Pero no solo se debe de poner en la mesa el tema del cambio climático (el tema más comercial) sino se deben crear políticas tomando en cuenta a los 9 niveles planetarios, con prioridad a los que ya se han sobrepasado (pérdida de biodiversidad y los ciclos del nitrógeno) y así sucesivamente. La meta de la ONU debería ser: Tratar de disminuir los problemas de los límites que tienen números rojos así también se deben manejar los otros 6 límites restantes para que permanezcan bajo el umbral del límite, para así garantizar un desarrollo donde los límites estén en armonía con el planeta.

Bibliografía

Damien Simonart, Varsovia, Polonia. Apertura de la 19a convención de clima de la ONU en Varsovia. 11 de noviembre de 2013. Recuperado de: http://www.rfi.fr/europe/20131111-ouverture-19e-convention-climat-nations-unies-varsovie